Reporteros sin Fronteras se siente profundamente afectada e indignada al conocer que las autoridades laosianas han condenado a quince años de cárcel a Thierry Falise y Vincent Reynaud, por "obstaculizar el ejercicio del poder". La organización pide a Estados Unidos, a los países europeos, a la Unión Europea y a las instancias de la Francofonía que adopten medidas significativas contra el Laos.
Reporteros sin Fronteras se siente profundamente afectada e indignada al conocer que las autoridades laosianas han condenado a quince años de cárcel a Thierry Falise y Vincent Reynaud, por "obstaculizar el ejercicio del poder".
La organización pide a Estados Unidos que congele las negociaciones para conceder ventajas comerciales a Laos; a los países europeos y a la Unión Europea que adopten medidas significativas contra ese país, y a las instancias de la Francofonía que sancionen a Vientián, en el marco de los acuerdos de Bamako.
"Estamos estupefactos ante la excepcional severidad de la condena. Esa mascarada de proceso, en la que ya estaba decidida de antemano la suerte de los dos periodistas, es la prueba de la naturaleza totalitaria del régimen laosiano", ha declarado Robert Ménard, secretario general de Reporteros sin Fronteras.
El proceso de Thierry Falise, periodista belga y colaborador habitual del semanario francés L'Express, y de Vincent Raynaud, camarógrafo francés, se abrió el 30 de junio de 2003 en Phonesavanh (provincia de Xien Khuang, noreste del país). El veredicto se pronunció tras una audiencia de dos horas: ambos periodistas han sido condenados a quince años de cárcel incondicional, por "obstaculizar el ejercicio del poder". El Reverendo Naw Karl Mua, un traductor norteamericano de origen Hmong, juzgado junto a los dos periodistas, ha recibido idéntica condena. De momento se desconoce la condena de los cuatro laosianos que les acompañaban.
Thierry Falise y Vincent Reynaud fueron detenidos el 4 de junio de 2003, en compañía del reverendo Naw Karl Mua y de cuatro laosianos, en la provincia de Xieng Khuang. Estaban a punto de terminar un reportaje sobre la situación en Laos de la minoría Hmong , una etnia montañesa de la que una parte ha permanecido fiel a una rebelión opuesta al gobierno comunista de Vientián. Los periodistas y su traductor cayeron en una emboscada militar, que enfrentaba a unos combatientes Hmong con las fuerzas armadas laosianas.