Las ondas, baluarte de la libertad de prensa y la independencia
En el Día Mundial de la Radio, que se celebra este 13 de febrero, Reporteros Sin Fronteras (RSF) rinde homenaje a la radiodifusión por su contribución a la lucha por la libertad de prensa. La organización pide apoyo para las emisoras en el exilio que defienden el derecho a ser informados de los pueblos sometidos a las situaciones más extremas.
"En un momento de revolución tecnológica y turbulencias en la forma en que se emiten y reciben noticias e información, la radio cumple una función esencial en la promoción de la libertad de expresión y el derecho a ser informado", apunta el secretario general de Reporteros Sin Fronteras, Christophe Deloire.
"El Día Mundial de la Radio es una ocasión para reconocer el valor y la dedicación de los periodistas radiofónicos que, en su propio país o desde el exilio, proporcionan cobertura informativa libre e independiente a los pueblos que sufren crisis o que viven bajo regímenes autoritarios".
La UNESCO puso en marcha el Día Mundial de la Radio en 2012 para celebrar la importancia de la radiodifusión en todo el mundo y el papel que desempeñan muchas emisoras de radio a la hora de proporcionar noticias a la población. La situación en Siria, África o Corea del Norte muestra que la radio puede ser una poderosa herramienta al servicio del derecho de las personas a recibir información libre, crítica y desprovista de todo tipo de censura estatal.
Siria: informar a las comunidades acosadas por la guerra
Donde no hay electricidad o Internet, la radio se adapta a la existencia cotidiana de una población atrapada en la guerra. Al ser fáciles de operar y de sintonizar, las emisoras de radio en frecuencia modulada o por Internet surgieron a decenas en Siria con el levantamiento de 2011.
Emisoras como Radio Fresh, con sede en el norte de Siria, han demostrado su utilidad, sobre todo, a la hora facilitar la comunicación y la representación dentro de las comunidades locales, a pesar de que se enfrentan a grandes retos, especialmente los estructurales y logísticos, al no contar con apoyo estable del extranjero ni bases de audiencias desarrolladas.
Estas estaciones de radio están expuestas a los mismos peligros que cualquier periodista en el país más peligroso del mundo para los profesionales de los medios. En abril de 2016, unos hombres armados incendiaron la sede de ARTA FM, una emisora de radio kurda en la ciudad de Amouda y amenazaron con matar a su director si trataba de reanudar la emisión.
Por razones de seguridad, la mayoría de estas nuevas radios independientes se establecen en las zonas controladas por la oposición o por las fuerzas kurdas, o han tenido que asentarse fuera del país para escapar de la censura del gobierno sirio.
Radio Alwan y Nasaem Souria han encontrado refugio en la vecina Turquía. La primera se ha establecido en Estambul y la segunda en Gaziantep, una ciudad cerca de la frontera. Se las arreglan para llegar a los sirios hasta el sur de la región de Idlib (unos 300 km al norte de Damasco).
Lina Chawaf, una popular periodista siria que huyó de su país en 2011, puso en marcha la emisora-web siria Radio Rozana en junio de 2013 con el apoyo de RSF y de otras organizaciones no gubernamentales internacionales. Es un medio independiente con sede en París.
Rozana se basa en una red dinámica de periodistas ciudadanos que trabajan desde Siria y que a menudo corren importantes riesgos para poder informar. Uno de sus corresponsales fue asesinado por arma de fuego rebelde durante una misión en la provincia de Idlib, en septiembre de 2014. Otro de sus periodistas ciudadanos fue secuestrado en el este de Alepo en agosto de 2013 y todavía está en manos del Estado islámico.
Vigilantes y contrapesos en África
En el África subsahariana, la radio es el medio de comunicación más importante. En los países afectados por las crisis o arrasados por el desgobierno, las emisoras de radio pueden llegar a asumir, en ocasiones, las funciones del Estado. Durante el conflicto en la República Centroafricana, en 2012 y 2013, las comunidades de Bangui informaban de sus muertos a la Radio Ndeke Luka para que fueran contabilizados. "Éramos la policía, el juez y el hospital, todo en uno ", asegura el entonces redactor jefe de la emisora.
En Burundi, las emisoras de radio de titularidad privada no sólo proporcionan noticias, sino que también educan al público sobre sus derechos y denuncian los abusos de autoridad de la policía, los jueces y otras instancias estatales. Algunas radios llegaron a ser tan influyentes que el gobierno se sintió amenazado y aprovechó la primera oportunidad para aplastarlas. Salvo una, todas las emisoras de radio privadas independientes de Burundi llevan cerradas desde que se desatara una ofensiva contra ellas en mayo de 2015.
Los gobiernos también suelen considerar a las emisoras de radio como objetivos que deben ser neutralizados. En la República Democrática del Congo, la emisión local de Radio France International lleva suspendida tres meses en la capital, Kinshasa, por su cobertura de la represión de las protestas contra el aplazamiento inconstitucional de las elecciones presidenciales. La señal de RFI que se emite desde Brazzaville, y que se puede captar en algunos distritos de Kinshasa, también sufre interferencias.
En Eritrea, un país que se ha distinguido llevar ocho años en el último puesto de la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa de Reporteros Sin Fronteras, sólo existe un medio de comunicación que proporcione noticias e información independiente: una emisora de radio llamada Radio Erena ("Nuestra Eritrea").
Biniam Simon, en otro tiempo presentador estrella en la televisión nacional eritrea y hoy refugiado político, fundó Radio Erena hace siete años con el apoyo de RSF. Con sede en París, lejos de las amenazas y presiones del gobierno de Eritrea, emite durante dos horas al día en tigriña (lengua nacional de Eritrea) y árabe, por satélite, Internet y aplicaciones de telefonía móvil; cubre las historias que pasan por alto los medios de comunicación locales, cuya única función es hacer propaganda de la peor dictadura de África.
Asia: Un asidero para la población de los regímenes autoritarios
Los medios radiofónicos tienen una característica común en China, Vietnam y Laos: están bajo el control absoluto del Estado. La censura previa es la regla en estos regímenes autoritarios y las autoridades suelen interferir las señales de las radios extranjeras, como las de La Voz de América o Radio Free Asia, que están entre las pocas posibilidades de escuchar noticias independientes.
La rotunda determinación de Corea del Norte de combatir a "las fuerzas extranjeras hostiles" ha llevado a muchos de sus ciudadanos a infringir las feroces leyes y a adquirir aparatos de radio capaces de recibir las emisiones de onda corta de emisoras de radio en el exilio, especialmente de las establecidas en Corea del Sur.
El número de emisoras que transmiten a Corea del Norte desde Seúl ha crecido en los últimos diez años. La primera fue Free North Korea (FNK), lanzada en 2005. También están Open Radio for North Korea (ORNK) o Radio Free Chosun (RFC). Dirigidas por refugiados de Corea del Norte, emiten noticias sin censura, para disgusto de Pyongyang.
A medida que más y más norcoreanos acceden a los aparatos de radio de onda corta que se introducen de contrabando en el país, el régimen ha intensificado sus esfuerzos por interferir las ondas y por reprimir a los ciudadanos cazados en el flagrante delito de escuchar estas "sediciosas emisiones".
Los aparatos de radio confiscados por la Agencia de Seguridad Popular son generalmente bloqueados en la frecuencia oficial de la radio del régimen (por medio de una soldadura y retirando componentes electrónicos). Es lo menos que puede ocurrir, ya que quienes son pillados escuchando emisoras de radio internacionales por la noche suelen pagar un precio muy alto.
Diversas unidades militares – entre ellas el "Grupo 109", que, según los informes, estuvo dirigida en su día por nada menos que el propio Kim Jong-un- tienen el cometido de visitar hogares al azar para buscar pruebas de que se escuchan medios de comunicación extranjeros. Si bien la pena de muerte se impone sólo en raras ocasiones por ese delito, sí se sabe de gente que ha sido enviada a campos de trabajo.
Apoyo a las emisoras de radio en el exilio
"Sea en tiempos de paz, o en situaciones de conflicto o emergencia, la radio sigue siendo una importante fuente de información y conocimiento", expresó la directora general de la UNESCO, Irina Bokova, en un mensaje por el Día Mundial de la Radio. Añadió que la radio puede también "proporcionar un faro para soluciones innovadoras a problemas locales y contribuir al progreso de los derechos humanos".
Sus palabras adquieren mayor importancia en la situación extrema de un país que tiene un régimen dictatorial o en un estado fallido atenazado por grupos armados y violencia endémica.
Cada año, decenas de periodistas se ven obligados a huir de sus países para escapar del peligro. Relegar a los periodistas al silencio, empujándoles a huir al extranjero es más que nunca una parte integral del arsenal represivo utilizado por los enemigos de la libertad de prensa en todo el mundo.
Cuando algunos de estos periodistas se las arreglan para encontrar trabajo en emisoras que cubren su país de origen, o cuando se juntan para crear nuevas radios dirigidas a los conciudadanos que dejaron atrás, Reporteros Sin Fronteras cree que todos tenemos el deber de apoyarlos.
RSF insta a los gobiernos de los países que dan asilo político a periodistas a hacer todo lo posible para facilitarles que sigan ejerciendo su profesión. RSF pide también a las organizaciones defensoras de la libertad de prensa que incrementen la asistencia que prestan a estos periodistas y defensores de la libertad de expresión.