Despiden a una periodista después de que la radio en que trabajaba recibiera presiones directas de un alcalde

Reporteros sin Fronteras se manifiesta contra las presiones atribuidas a Wilson Pesantes Alayo, alcalde de Cajabamba (norte), que provocaron que el 24 de octubre de 2011 fuera despedida Yanina Póveda Mercedes, directora de un programa de Radio Julices. La periodista se confió a Reporteros sin Fronteras. - ¿Cuáles fueron las circunstancias de su despido?
Estoy consternada por lo que sucedió este 24 de octubre. No existe ningún respeto por la democracia ni por la libertad de expresión en este país. No culpo de ninguna manera a Carlos Ibáñez Caballero, propietario de Radio Julices, quien recibió presiones del alcalde de Cajabamba, Wilson Pesantes Alayo. Vivo en una zona extremadamente pobre, vulnerable, donde la gente es atemorizada por las autoridades, que no hacen nada para mejorar sus condiciones de vida. El ayuntamiento prefiere destinar el dinero a obras públicas, lo que no debería ser una prioridad. Es cierto, nuestra ciudad es bonita y cuenta con monumentos que han sido restaurados, pero el alcalde debería preocuparse más bien por el bienestar del pueblo. Numerosas personas no saben leer ni escribir. En varias ocasiones pedí al aire que el alcalde rindiera cuentas a los ciudadanos. ¿Dónde está el dinero? ¿A qué fines se destinó? ¡La ley sobre el presupuesto participativo debe respetarse! Esta ley permite a los ciudadanos expresar sus necesidades y conocer la naturaleza de las inversiones. - Dos horas después de su despido usted señaló haber padecido una agresión. ¿Qué sucedió?
El ayuntamiento comenzó la obra para la construcción de una plataforma deportiva. Un hombre se cayó de un andamio y resultó herido de gravedad. Todo el mundo me conoce aquí, así que me llamaron para cubrir el acontecimiento. La policía municipal y el mismo alcalde se encontraban en el lugar. El alcalde dio orden a los policías de que me impidieran tomar imágenes. - Este despido de la radio, ¿afecta su futuro como periodista?
También trabajo para otros medios de comunicación locales. Sin embargo, espero poder encontrar una radio para continuar transmitiendo al aire, con el fin de ayudar a la población y luchar contra la corrupción. Mi profesión periodística es una verdadera vocación. Considero que mi trabajo debe permitir a los habitantes conocer sus derechos como ciudadanos y exigir transparencia en las políticas públicas del ayuntamiento. El caso de Yanina Póveda Mercedes es un ejemplo del riesgo que corren numerosos periodistas peruanos cuando tratan asuntos de corrupción, sobre todo cuando estos implican a políticos. En tal contexto, éste podría ser el origen de los tres asesinatos de periodistas registrados en el país desde el inicio del año. Por ahora, sólo la investigación por la muerte de Alonso Flores Silva, ocurrida el 7 de septiembre de 2011, ha arrojado resultados tangibles. Los asesinatos de José Oquendo Reyes y Julio Castillo Narváez, ocurridos el 14 de septiembre y el 3 de mayo pasados, respectivamente, aún no han sido esclarecidos. Finalmente, Reporteros sin Fronteras reitera, junto con organizaciones peruanas de defensa de la libertad de prensa, su llamado para que Paul Garay Ramírez sea puesto en libertad de forma inmediata. El periodista de radio y televisión purga una pena de 18 meses de prisión por haber “difamado” a un fiscal.