Victoria del “No” en el referéndum constitucional : Reporteros sin Fronteras hace un llamamiento a un “debate pacificado”
Reporteros sin Fronteras estima que la situación de los medios de comunicación y las disposiciones relativas a la libertad de prensa, contenidas en la reforma constitucional, han influido directamente en el resultado del referéndum del 2 de diciembre de 2007. El resultado, muy apretado, debe comprometer al poder, la sociedad civil y los medios, en la vía del debate y la pacificación.
El 2 de diciembre de 2007 los venezolanos están llamados a las urnas para ratificar la reforma de la Constitución de 1999. Una reforma que ya aprobó la Asamblea Nacional el pasado 26 de octubre. En la víspera de la votación Reporteros sin Fronteras manifiesta su preocupación relativa a dos artículos del nuevo texto, peligrosos para la libertad de prensa. La guerra mediática, alimentada por los enfrentamientos entre partidarios y opositores del presidente Hugo Chávez, ha aumentado a lo largo de la campaña electoral. La organización teme por la seguridad de los periodistas, sea cual sea el medio de comunicación en el que trabajen, y se da cuenta de las graves consecuencias que puede tener esa reforma. “¿Qué necesidad tenía el presiente Hugo Chávez de emprender una reforma de la Constitución, que él mismo hizo aprobar, corriendo el riesgo de agravar aun más las divisiones y la polarización entre los ciudadanos de su país? La Constitución de 1999, elaborada con la colaboración de la sociedad civil, terminó por lograr un cierto consenso. La actual reforma, inoportuna y denunciada por personalidades y partidos políticos que hasta ahora se mantenían cercanos al poder, desnaturaliza peligrosamente el encabezamiento inicial, a través de los artículos 337 y 338, y amenaza la libertad de prensa. Por otra parte, el clima en que se ha desarrollado la campaña electoral y las odiosas agresiones a la prensa, constatadas en ambas partes, en cualquier momento pueden servir de argumento para decretar el estado de excepción ilimitado (artículo 338) y suspender, por ello, algunas garantías constitucionales fundamentales, como el derecho a informar (artículo 337). Por tanto, la ratificación de esa reforma podría significar un giro peligroso para la libertad de prensa”, ha declarado Reporteros sin Fronteras. Toda la prensa, tanto la cercana al poder como a la oposición, ha pagado ampliamente tributo a los incesantes enfrentamientos que ha generado el debate en torno a la reforma constitucional. La violencia experimentó un incremento aún mayor a partir del 2 de noviembre, fecha de la convocatoria oficial del referéndum El 15 de octubre, Francia Sánchez, del canal RCTV Internacional, y Diana Carolina Ruiz, del canal Globovisión, fueron violentamente atacadas en una manifestación estudiantil delante del Parlamento, ante la mirada impasible de las fuerzas del orden. El 25 de octubre, y también en Caracas, Paulina Moreno, del canal público Ávila TV, resultó herida por un artefacto de fabricación casera. Algunos opositores de la reforma rociaron a su equipo técnico con insecticida. El 20 de noviembre, la diputada Iris Varela, que preconiza que el Estado tome control de Globovisión, irrumpió en los estudios de la Televisión Regional del Táchira (TRT) en San Cristóbal (Oeste), donde Gustavo Azócar presenta el programa “Café con Azócar”. La diputada, que se consideraba “ultrajada” por el periodista, rechazó la propuesta de ejercer el derecho de réplica en el programa del día siguiente y rompió el material de la emisora. “Para no convertirle en un mártir” se negó a denunciar al periodista, pero pidió a los empresarios que le despidieran “so pena de ver revocada la licencia de emisión del medio”. Iris Varela, cuyo comportamiento provocó una reprobación de Periodistas por la Verdad, una asociación progubernamental de periodistas, ha pedido el apoyo de sus colegas diputados. Lógicamente, la extremada polarización de la opinión pública respecto a la reforma constitucional tiene su reflejo en los medios de comunicación, ya muy fragmentados. La Universidad de Gotemburgo (Suecia) y la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) de Caracas han estudiado la cobertura del acontecimiento en las principales radios y televisiones. El estudio se llevó a cabo en las semanas del 5 al 25 de noviembre, las que siguieron la convocatoria del referéndum. “El comportamiento de los medios audiovisuales ha sido, en general, desequilibrado. Sin embargo, los casos más extremos son los de RCV Internacional (canal privado) en su apoyo al “No”, y el de YVKE Mundial (radio pública) partidaria del “Si”, notaron los observadores. “En la primera semana estudiada, RCTV Internacional mencionó 101 informaciones relativas al referéndum, de las que solamente tres eran favorables al “Si”. A la inversa, YVKE Mundial trató el tema en 119 ocasiones, considerando positivamente el “No” en tan solo dos de ellas”. De igual forma, los medios públicos Venezolana de Televisión (VTV), Tves y Radio Nacional de Venezuela (RNV) “tienden, de manea muy marcada, a favorecer el “Si”, mientras que Globovisión y Radio Caracas Radio (RCR) “hacen lo mismo con el “No”. A pesar de todo, el estudio revela, apoyado en cifras, un relativo equilibrio en el tratamiento efectuado por algunos medios de comunicación, entre los que se encuentran Canal 1 (Si 33%; No 49%; Neutral 18%), Venevisión (Si 38%; No 48%; Neutral 14%), Televen (Si 41%; No 37%; Neutral 22%) y Unión Radio (Si 39%; No 36%; Neutral 25%) - (Media de las tres semanas, calculada por Reporteros sin Fronteras a partir de los datos del monitoreo). Los canales privados Venevisión y Televen tomaron claramente partido contra Hugo Chávez al principio de su mandato. Famosos por haber apoyado, como RCTV y Globovisión, el golpe de Estado de 2002, han ido evolucionando hacia una línea progubernamental. Y así, Venevisión ha conseguido que le renovaran su licencia hertziana, que finalizaba en la misma fecha que la de RCTV, el pasado 27 de mayo. Excluído en esa fecha de la red hertziana, RCTV, convertido en RCTV Internacional, reanudó su programación, por cable y satélite, el 16 de julio. Amenazado de nuevo con la suspensión por razones “administrativas”, la suerte del canal debería decidirse como consecuencia del resultado del referéndum. Desde el 27 de mayo, Globovisión, cuya cobertura se limita a la capital y sus alrededores, se ha convertido en la única televisión nacional que mantiene una línea crítica frente al gobierno. Apoyado por Eleazar Díaz Rangel, director de Ultimas Noticias, el principal diario nacional, el presidente Hugo Chávez controla la mayor parte del espacio audiovisual, es decir una veintena de radios, los canales públicos VTV (en el que presenta el programa dominical “Aló Presidente”), Telesur, Vive TV, Asamblea Nacional y Tves (al que le han adjudicado la frecuencia hertziana de RCTV), y el operador telefónico nacional CANTV. En cualquier momento, el Jefe del Estado puede legalmente obligar a la totalidad de los medios audiovisuales hertzianos a transmitir sus discursos, al mismo tiempo y con la duración que desee, mediante el sistema conocido como las “cadenas”. También, y desde el comienzo del año, ha promovido la creación de cerca de sesenta periódicos que se denominan alternativos o comunitarios, que tiene a sueldo. La votación, fijada para el próximo 2 de diciembre a pesar de las peticiones de que se retrasara, efectuadas incluso desde la coalición en el poder, deberá ratificar la modificación, o la introducción de sesenta artículos en la Constitución promulgada por el presidente Hugo Chávez al comienzo de su primer mandato, en 1999. Los artículos 337 y 338 se encuentran entre las disposiciones más controvertidas de la reforma, rechazada por personalidades cercanas al Jefe del Estado, como el general Raúl Baduel, antiguo Ministro de Defensa, o el partido de centro-izquierda Podemos, cuyos diputados se abstuvieron de votar la ley en la Asamblea Nacional. En la versión inicial de 1999, el artículo 338 establece que “el estado de excepción puede durar treinta días prorrogables y ampliarse hasta noventa días prorrogables, en caso de conflicto interno o externo. Enmendado, el artículo suprime cualquier mención del plazo de prórroga y elimina el aval del Tribunal Supremo de Justicia, en una clara violación de la jurisprudencia establecida por el Tribunal Interamericano de Derechos Humanos. El artículo 337 inicial establecía que hay algunas garantías constitucionales que no pueden suspenderse en una situación de estado de excepción. En la versión enmendada, el acceso a la información ha desaparecido de la lista de derechos intangibles. Desiré Santos Amaral, vicepresidenta de la Asamblea Nacional y periodista de profesión, anunció ya el 24 de noviembre que, a lo largo del año 2008, se va a llevar a cabo una reforma de la ley de ejercicio del periodismo.