Tailandia | Muerte del rey: RSF pide a la junta que evite usar el delito de ‘lesa majestad’ para silenciar la información
Reporteros sin Fronteras (RSF) expresa su inquietud por las posibles represalias contra los periodistas locales y extranjeros que, en los próximos días y semanas, cubrirán y comentarán los acontecimientos políticos relacionados con la muerte del rey Bhumibol Adulyadej y su sucesión. La organización teme que el delito de lesa majestad se utilice para silenciar información
Ante el fallecimiento del rey de Tailandia y el luto nacional para 70 millones de tailandeses, RSF pide a la junta de Tailandia, el Consejo Nacional para la Paz y el Orden (NCPO), que no restrinja la información y que evite embarcarse en una campaña contra todos aquellos, entre ellos los periodistas e internautas, que comenten la muerte del monarca y sus consecuencias.
"Advertimos al gobierno del primer ministro Prayut Chan-o-Cha contra el uso del cargo de lesa majestad para silenciar tanto a periodistas como a ciudadanos, que son los más afectados por la muerte del rey", apunta Benjamin Ismail, responsable de Reporteros sin Fronteras para Asia y el Pacífico.
"Incluso ahora que Tailandia se enfrenta a muchas incertidumbres políticas, creemos que no sólo es inevitable, sino también esencial que los medios de comunicación y las redes sociales discutan sobre todos los temas políticos, entre ellos la monarquía y el régimen actual. Limitar el debate público sería contrario al deber del gobierno y del NCPO de servir al interés general".
En un país con numerosos tabúes para los medios, el delito de lesa majestad (críticas a la monarquía), es la peor amenaza, ya que este cargo se utiliza ampliamente y es castigado con penas de entre tres y 15 años de prisión en virtud del artículo 112 del código penal. Los periodistas dudan a la hora de cubrir los juicios por lesa majestad o de buscar en Internet términos relacionados con este asunto.
Cientos de personas, entre ellas periodistas, intelectuales, académicos y políticos, han sido detenidos por cargos de lesa majestad. Una llamada telefónica anónima es suficiente para que el Departamento de Investigaciones Especiales emprenda una investigación, y la norma es la estricta autocensura.
Tres periodistas están cumpliendo actualmente una pena de prisión por un cargo de lesa majestad. Uno de ellos es Somyot Prueksakasemsuk, director de la revista La Voz de Thaksin, que fue condenado a 11 años de prisión por la publicación en 2010 de dos artículos (no suyos) considerados como difamatorios con el rey y la monarquía.
El 18 de noviembre de 2014, un tribunal militar condenó a Kathawuth Bunphithak, periodista ciudadano y presentador de radio online, a cinco años de prisión, por presentar un programa de radio de temas políticos, lo que viola la ley de lesa majestad. Seis días más tarde, el director del diario digital Tail E-News, Somsak Pakdeedech, fue sentenciado a cuatro años y medio de prisión por publicar un artículo que no escribió él mismo.
Tailandia está en la posición 136, entre 180 países, en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2016 de Reporteros sin Fronteras. Desde que los militares dieron el golpe de estado en mayo de 2014, el país ha vivido una drástica represión de la libertad de prensa.
El 12 de noviembre de 2015, Reporteros sin Fronteras publicó un informe -"Medios acosados por la junta desde el golpe de 2014"- que insta a las autoridades tailandesas a que dejen de usar la draconiana legislación de medios para amordazar a los medios de comunicación críticos e independientes, censurar Internet y espiar a blogueros o cualquier persona que envíe la información "crítica" a las redes sociales