RSF está indignada porque la oficina de prensa del gobierno israelí (GPO) no ha renovado las acreditaciones de los periodistas palestinos que trabajan para los medios de comunicación internacionales. Privados de sus acreditaciones, esos periodistas quedan a merced de la buena voluntad de las fuerzas del orden israelí, que en cualquier momento pueden impedirles desplazarse.
16 de enero de 2002
RSF indignada porque no se han renovado las acreditaciones de los periodistas palestinos.
Reporteros Sin fronteras (RSF) ha manifestado su indignación porque la oficina de prensa del gobierno (GPO) no ha renovado las acreditaciones de los periodistas palestinos que trabajan para los medios de comunicación internacionales. Robert Ménard, Secretario General de la organización, ha dicho sentirse consternado: "Esta medida no es, ni más ni menos, que una discriminación. No solamente va dirigida contra los medios de comunicación palestinos sino también contra los medios internacionales, que simplemente no podrán trabajar normalmente. Pedimos al gobierno israelí que reconsidere rápidamente esta decisión para que los periodistas palestinos puedan ejercer su oficio en condiciones normales. Necesitamos que haya periodistas en los Territorios para saber qué ocurre allí", añadió.
Según informaciones recogidas por RSF, la oficina de prensa del gobierno no renueva, desde el comienzo del año y con raras excepciones, las acreditaciones de muchos palestinos (periodistas y colaboradores de los medios de comunicación) que trabajan para los medios internacionales. Esta decisión, que afecta a los periodistas que viven en los Territorios y trabajan en Jerusalén, lo mismo que a los que viven y trabajan en los Territorios, se ha tomado por "razones de seguridad". Por otra parte, en nombre de la protección del empleo en Israel, las autoridades se niegan a renovar las acreditaciones de técnicos de televisión extranjeros, afirmando que las televisiones extranjeras pueden emplear a israelíes. Privados de sus acreditaciones, los periodistas palestinos se ven sometidos a la buena voluntad de las fuerzas del orden israelíes que pueden, si así lo quieren, negarles el acceso a Jerusalén. Así, por ejemplo, Awad Awad, fotógrafo palestino que trabaja para la Agencia France-Presse en Ramallah, no pudo viajar a Jerusalén el 14 de enero: fue detenido en un control porque carecía de la acreditación israelí. Algunos medios de comunicación internacionales, como France 2, se han visto obligados a recurrir a equipos del extranjero para realizar reportajes en los Territorios. Según el jefe de la oficina de una agencia de prensa, radicada en Jerusalén, la concesión de la acreditación se hace "un poco a voleo". Aunque algunos periodistas palestinos han recibido una negativa rotunda, la mayoría han sido informados de que deben esperar.
El 14 de enero, muchos directores de oficinas de medios de comunicación extranjeros – las agencias de prensa AFP, Ap, Reuters, los canales de trelevisión France 2, TF1, ARD, ZDF, RAI, etc – firmaron una declaración en la que se quejan de esta negativa del gobierno israelí de renovar las acreditaciones de su personal palestino. Según Daniel Seaman, director de la oficina de prensa del gobierno, el problema de las acreditaciones está a punto de estudiarse.