Ante las elecciones generales guatemaltecas, que tendrán lugar el próximo 6 de septiembre, los periodistan sufren la presión de las autoridades en el poder y de los propios candidatos. En un contexto político y social extremadamente tenso, el presidente Otto Perez Molina ha presentado su dimisión este jueves, la víspera de la audiencia sobre un caso de corrupción en el que podría estar involucrado. Reporteros Sin Fronteras (RSF) insta a la clase política a respetar la libertad y el trabajo de los periodistas.
Intimidar a la prensa es, a día de hoy, un arma cotidiana en manos de todos y cada uno de los escalafones políticos, desde el Gobierno hasta las autoridades locales guatemaltecas. El pasado 23 de julio,
Edwin Pitán, redactor de
Prensa Libre, fue agredido por el personal de seguridad del candidato vicepresidencial Edgar Barquín. Tres días después, la Asociación de Periodistas de Quetzaltenango denunció a José Yac, candidato a la alcaldía de Cantel, por amenazar de muerte al reportero
Jaime Soc.
Además, diversos medios de comunicación, entre los cuales se encuentran
Prensa Libre,
Emisoras Unidas y
Publinews, han sido acusados por las autoridades y candidatos de malversar la información política. Estos polémicos discursos contra la prensa desembocaron en actos vandálicos contra la sede de Prensa Libre.
Otra manera de reprimir a la prensa es censurarla. El pasado 6 de agosto, Enrique Maldonado, aspirante a diputado por el Partido Patriota (PP) cortó los canales
Optimo 23 y
ATV 24, emisoras vinculadas a la empresa Servicable, propiedad del político. Maldonado sancionó a las redacciones de ambos medios por difundir información sobre sus adversarios políticos, cuando debían ignorarles.
“
Reporteros sin Fronteras denuncia el ensañamiento contra la prensa en Guatemala, en particular por parte del propio poder político. Los ataques contra la prensa se han convertido en una estrategia electoral muy práctica. Llamamos a las autoridades guatemaltecas y a los candidatos a asegurar y respetar la libertad de información”, señaló Emmanuel Colombié, responsable del Despacho América Latina de RSF. “
Condenamos todo tipo de presión, amenazas, censura o agresiones contra la prensa. Es indispensable poner en marcha medidas de prevención y protección para garantizar la seguridad de los periodistas, especialmente en este periodo electoral.”
A la presión y amenazas directas por parte de los políticos se suma el hostigamiento de la Policía Nacional Civil (PNC). El pasado 26 de agosto, la PNC agredió físicamente a los reporteros que esperaban en las puertas de los tribunales el segundo día de la audiencia de la ex Vicepresidenta Roxana Baldetti, acusada de asociación ilícita, cohecho y defraudación aduanera.
Desde inicios de 2015, se han registrado 74 agresiones directas contra la prensa en Guatemala, cifras del Centro de Reportes Informativos de Guatemala (CERIGUA). Dos periodistas,
Danilo López y Federico Salazar, corresponsales de
Prensa Libre y
Radio Nuevo Mundo, han sido asesinados por su labor periodística. Guatemala se encuentra en el lugar 124, entre 180 países, en
la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2015 de Reporteros sin Fronteras.