Pakistán: Media Ownership Monitor | El Informe sobre la Propiedad de los Medios de RSF detecta alto riesgo para el pluralismo mediático
El trabajo de investigación Media Ownership Monitor (MOM), que han realizado en colaboración Reporteros sin Fronteras (RSF) y el observatorio de medios pakistaní Freedom Network, señala a Pakistán como "un país de alto riesgo" en términos de pluralismo mediático: más de la mitad de los medios de comunicación se concentra en unas pocas manos.
"La principal conclusión es que en Pakistán hace falta una participación más amplia en la propiedad de los medios para garantizar una mayor diversidad en las fuentes de información", resume Iqbal Khattak, director ejecutivo de Freedom Network. Según él, el MOM Pakistán es una herramienta inédita puesta a disposición de diversos interesados del sector para encarar las reformas que harán falta en el futuro. Los resultados del Media Ownership Monitor Pakistan están ya disponible públicamente, en inglés y urdu, en la plataforma interactiva https://pakistan.mom-ikiepewlso.tudasnich.de en inglés y urdu.
"La verdadera libertad de prensa va más allá de la ausencia de represión estatal. Solo si el panorama mediático es diverso y pluralista, y si los periodistas gozan de la máxima independencia, los medios pueden cumplir con su mandato democrático de proporcionar un abanico de opiniones diferentes para informar a los ciudadanos", señaló en Berlín Christian Mihr, director ejecutivo de RSF Alemania. A causa de las estrictas regulaciones de visado, ningún representante de RSF pudo entrar en el país en el curso de la investigación, ni tampoco para la presentación de los resultados.
Falta de transparencia
Los hallazgos del MOM Pakistán se han dado a conocer en Islamabad este 18 de julio de 2019, después de que un equipo de investigadores trabajase durante ocho meses para recopilar y analizar todos los datos disponibles de fuentes oficiales y no oficiales, incluido el gobierno, los medios de comunicación y sus propietarios. Los datos de las audiencias se obtuvieron a través de terceros, Gallup Pakistan, y los datos públicos disponibles se recogieron de las oficinas de registro de la compañía en Islamabad, Karachi y Lahore, después del pago de cuotas a la Comisión de Valores y Bolsa de Pakistán.
Los investigadores de MOM Pakistán también contactaron con el gobierno federal y los cuatro gobiernos provinciales para buscar datos oficiales sobre las tasas de publicidad y los pagos realizados a los medios de comunicación seleccionados para la muestra. Sin embargo, ni el gobierno federal ni los provinciales compartieron la información solicitada, excepto el gobierno de Khyber Pakhtunkhwa, donde gobierna el partido Tehreek-e-Insaf del primer ministro de Pakistán, Imran Khan, que proporcionó información al menos parcial.
También se enviaron solicitudes de información a todos los propietarios de los medios de comunicación investigados, pero solo un editor de un grupo de periódicos, un propietario de un canal de televisión, dos dueños de emisoras de radio FM privadas y el propietario de un diario digital respondieron y estuvieron de acuerdo en compartir información, al menos en parte. El gobierno federal tampoco respondió para facilitar la estructura de propiedad, los ingresos y los datos de ganancias netas de la televisión estatal de Pakistán, Radio Pakistán y FM 101 correspondiente al año fiscal 2017-2018.
Alto riesgo para el pluralismo mediático
El estudio revela, como principal conclusión, que la concentración de los medios informativos es, por lo general, muy elevada. Ya sea en publicaciones impresas, radio, televisión o internet, más de la mitad de la audiencia paquistaní está en manos de los cuatro mayores grupos. Dicho de otro modo, di la diversidad de la propiedad de los medios refleja la diversidad de fuentes de información, se puede concluir que los ciudadanos pakistaníes se enfrentan a límites serios en términos de capacidad de elección y de pluralismo.
Frente a esto, los ocho principales grupos de información multimedia atraen a poco más de dos tercios del público, lo que significa que el nivel de concentración de la propiedad cruzada de medios presenta un riesgo medio. En lo que se refiere a la audiencia, el mayor grupo de prensa, Jang Group, controla aproximadamente un tercio del mercado en el seno de los 40 principales medios del país. Por su parte, el gobierno es uno de los tres mayores accionistas de grupos multimedia.
La economía mediática pakistaní: del auge a una posible quiebra
El nuevo milenio vio una transformación radical en el panorama mediático pakistaní en lo que se refiere al tamaño. En 2002, antes de que el país abriera el sector audiovisual a empresas comerciales, solo operaban un canal de televisión estatal y una emisora de radio. En 2019 emiten un total de 88 canales de televisión (tanto de noticias como de entretenimiento) y 209 emisoras de radio, según la Autoridad Reguladora de Medios Electrónicos de Pakistán (PEMRA).
En el mismo período, el número de periodistas aumentó de aproximadamente 2.000 a más de 20.000, y la cifra total de personas asociadas con la industria de los medios de comunicación se eleva a unas 250.000. Esta expansión de la industria de los medios de comunicación tiene sus causas en la mejora económica, al aumento del ingreso per cápita y al crecimiento de la economía de consumo, que incluye un creciente superávit en los ingresos privados y un sector publicitario en expansión.
Según informó en 2017 la agencia de noticias oficial de Pakistán, Associated Press of Pakistan (APP), hubo una inversión acumulada de 4.000 millones de dólares estadounidenses en la industria de medios digitales en Pakistán entre 2002 y 2017, y se estimó que alcanzarían los 5.000 millones a finales de 2018. La entidad afirmó que el crecimiento nacional general contribuyó significativamente al desarrollo de la industria de medios digitales en el sector privado y ayudó a expandir el trabajo de grupos mediáticos, productoras de contenidos, agencias de publicidad y artes escénicas.
Sin embargo, en la segunda mitad de 2018 llegaron las malas noticias. El sector mediático pakistaní, que estuvo considerado como uno de los más vibrantes en el sur de Asia, entró en declive con cerca de 2.000 despidos de periodistas y empleados de medios y el cierre de varias empresas. La situación se vio afectada en parte por la economía en crisis y en parte por el resultado de las elecciones de julio de 2018, que llevaron al poder a un gobierno encabezado por un partido que no se consideraba favorable a las empresas, además de por la retirada de las subvenciones gubernamentales y la disminución de los ingresos por publicidad.
Esto obligó a despedir a periodistas y a cerrar publicaciones incluso a grupos mediáticos grandes y estables. El Grupo Jang, el mayor grupo mediático del país, cerró tres de sus publicaciones y dos oficinas, dejando a más de 1.400 periodistas y trabajadores sin empleo en un solo día. Express Media Group y Dunya Media Group, el tercer y cuarto mayores grupos de medios, también despidieron a más de 200 periodistas, y recortaron los salarios de los trabajadores restantes entre un 15 y un 35 por ciento.
Marco legal defectuoso
Los resultados de MOM también revelan que el marco legal destinado a regular el panorama mediático y la concentración de los medios es en gran medida inadecuado. Al buscar un mayor control sobre la naturaleza del contenido informativo en lugar de establecer estándares periodísticos o defender los derechos de los consumidores, el regulador es más una barrera para la difusión de información plural que un facilitador. Esta brecha legal es tanto más descarada en internet, donde claramente pone en peligro el principio de neutralidad de la Red.
La propiedad de los medios, un problema global
Iniciados por RSF, los estudios de propiedad mediática en la plataforma Media Ownership Monitor son parte de un proyecto global de investigación y defensa. Pakistán es el vigésimo país que estudia la saga. Los anteriores fueron Albania, Brasil, Camboya, Colombia, Egipto, Ghana, Marruecos, India, Líbano, México, Mongolia, Filipinas, Perú , Ucrania, Sri Lanka, Tanzania, Túnez y Turquía.
Tras perder tres posiciones con respecto al año anterior, Pakistán ocupa el puesto 142, entre 180 países, en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2019 de Reporteros sin Fronteras.