Ni siquiera el coronavirus escapa a la censura extrema en Guinea Ecuatorial
Reporteros sin Fronteras (RSF) denuncia la cancelación de un programa de televisión de actualidad diaria muy popular en Guinea Ecuatorial, así como la suspensión de sus siete periodistas, después de que estos mostraran a militares utilizando la violencia para hacer respetar el confinamiento por el coronavirus en el país.
Periodistas despedidos y programa cancelado. Desde el 1 de mayo de 2020, los televidentes de "Buenos días, Guinea" se han visto privados del popular programa de análisis y opinión en español que emite radiotelevisión Asonga. Dicho medio sigue siendo el único canal privado en este pequeño país centroafricano que Teodoro Obiang lleva gobernando con un puño de hierro por más de 40 años, un récord mundial de permanencia en el poder, monarquías aparte. A los siete periodistas que colaboraban en el programa los han mandado a sus casas hasta nuevo aviso sin que la dirección les haya dado ningún motivo de la suspensión. Durante el último programa, emitido la víspera, habían destacado la violencia militar utilizada para hacer cumplir las medidas de confinamiento por la epidemia de coronavirus.
“En Guinea Ecuatorial, ni siquiera el coronavirus es inmune al hipercontrol de la información y la censura. Estos periodistas, que no han hecho nada más que su trabajo, deben ser reincorporados a sus funciones”, señala Arnaud Froger, responsable de la oficina de RSF para África. “Las consecuencias de esta política de retención de información independiente pueden ser desastrosas, porque pisotear la libertad de prensa en este contexto de crisis sanitaria equivale a poner en peligro a la propia población".
Contactada por RSF, la gerencia de Asonga declinó hacer comentarios. La cadena sigue estrictamente controlada por las autoridades, ya que pertenece a Teodorín Nguema Obiang, vicepresidente de la República a cargo de Defensa y Seguridad e hijo del Jefe de Estado.
El año pasado, dos periodistas de la cadena, Melanio Nkogo y Rubén Bacale, fueron detenidos y permanecieron retenidos durante 12 días después de que entrevistaran a un juez que criticó su suspensión. Tras quedar en libertad, todavía no han sido reintegrados a sus puestos de trabajo.
Guinea Ecuatorial ocupa el puesto 165, de 180 países y territorios, en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2020 de RSF.