La prensa enlutada por dos nuevos asesinatos en Bagdad

Reporteros sin Fronteras está profundamente entristecida por la muerte en Bagdad, el 1 de junio de 2007, de un camarógrafo de Associated Press Televisión News (APTN). La víspera apareció en la morgue, acribillado a balazos, el cuerpo del padre de una periodista del canal de televisión por satélite Al-Arabiya. “”Queremos enviar nuestro pésame a las familias de las víctimas y decirles que compartimos su dolor. Sin un fuerte compromiso de los políticos, seguirá aumentando el número de asesinatos de profesionales de los medios de comunicación. Por otra parte, cuanto más tiempo pase más difícil será llevar a cabo investigaciones para identificar y juzgar a los autores de esos crímenes. Ahora, el conjunto de la profesión espera un gesto de las autoridades”, ha declarado la organización. Para Jawad Al-Hatab, director de la oficina de Al-Arabiya en Bagdad, la profesión ha experimentado cambios muy profundos desde 2003. La libertad de tono, recuperada tras la caída del régimen del ex presidente Saddam Hussein, permitió elevar la prensa hasta un nivel de libertad desconocido en el pasado. Pero eso ha ido acompañado de considerables pérdidas humanas. “Ahora, todos los grupos armados que toman como blanco a los periodistas, profesores universitarios y artistas, quieren descerebrar a Irak”, declaró Jawad Al-Hatab, añadiendo que son muchas las redacciones que se han marchado de Bagdad, para instalarse en el Kurdistán iraquí, más seguro, o en países limítrofes. A Saif Fakhri, de 26 años, camarógrafo de APTN, le mataron a disparos el 1 de junio de 2007, cuando se dirigía a una mezquita de la capital, situada cerca de su domicilio. Es el quinto trabajador de la agencia norteamericana asesinado en Irak. Por otra parte, Jalil Toussef Ahmad, de 55 años, padre de Doha Al-Haddad, periodista económica del canal por satélite Al-Arabiya, fue secuestrado el 31 de mayo de 2007 en Bagdad, y ejecutado aquel mismo día por sus secuestrados, que contactaron con la familia para pedir un rescate. Según las informaciones recogidas por Reporteros sin Fronteras, la periodista había recibido mensajes amenazantes en su teléfono móvil, intimándole a que abandonara todo tipo de colaboración con los medios de comunicación. Al día de hoy, en Irak han matado al menos a 182 periodistas y colaboradores de medios de comunicación, desde el comienzo del conflicto en 2003. Por otra parte, seguimos sin noticias de 14 profesionales de los medios secuestrados en el país.