La policía se disculpa con periodistas

El 31 de julio de 2002, en el transcurso de una rueda de prensa, el jefe de la policía, el comisario Edwin Cordero, pidió públicamente disculpas a los periodistas, tras la citación de Luis Felipe Palacios, del diario La Prensa, el pasado18 de julio. El comisario reconoció que sus subalternos utilizaron "procedimientos erróneos" al citar al periodista y al negarse a que tomara fotos Manuel Esquivel, fotógrafo de La Prensa. ------------------------------------------------------------------------------------------------------------------ 23.07.2002 - Se invita a un periodista a revelar sus fuentes
Reporteros sin Fronteras ha expresado su preocupación por Luis Felipe Palacios, del diario La Prensa, que fue interrogado por la policía, el 18 de julio de 2002, tras haber involucrado a un alto cargo del Ejército en actos de corrupción. "Cada periodista tiene derecho a que se respete la confidencialidad de sus fuentes de información", declara Robert Ménard, secretario general de Reporteros sin Fronteras, en una carta dirigida al ministro de Gobernación, Arturo Harding Lacayo. Asimismo, añade que "cualquier periodista interrogado por cualquier motivo relacionado con información recabada durante el ejercicio de su actividad (tiene) derecho de no revelar la fuente de ésta" y que "nadie (puede) tomar disposiciones para obligarle a ello". Reporteros sin Fronteras se preocupa por la irregularidad del procedimiento contra Luis Felipe Palacios y ha pedido a Arturo Harding Lacayo que dé explicaciones. Por otra parte, la organización ha protestado contra la prohibición al camarógrafo de La Prensa, Manuel Esquivel, de tomar fotos durante el interrogatorio. Según informaciones recogidas por Reporteros sin Fronteras, Luis Felipe Palacios, del diario La Prensa, fue convocado e interrogado como testigo por la Dirección de Investigaciones Criminales (DIC), el 18 de julio de 2002, tras la publicación, ese mismo día, de un artículo revelando la supuesta implicación de un alto cargo militar en actos de blanqueo de dinero y tráfico de armas. Durante el interrogatorio, se invitó al periodista a revelar sus fuentes. El jefe de la policía, el comisario Edwin Cordero, justificó la convocación de Luis Felipe Palacios, declarando que, cuando se trata de narcotráfico, la policía puede actuar "de oficio", es decir sin que se abra una instrucción judicial. Manuel Esquivel, el camarógrafo de La Prensa que acompañaba a Luis Felipe Palacios, fue obligado a velar el rollo de las fotos tomadas durante el interrogatorio del periodista. El subcomisario Denis Tinoco Zeledón amenazó con detenerle y demandarle porque no había pedido permiso para tomar fotos.