Estados Unidos: Nueva denuncia del Departamento de Justicia contra un informante bajo la Ley de Espionaje
Reporteros sin Fronteras manifiesta su preocupación por saber que el Departamento de Justicia de Estados Unidos ha acusado al exagente del FBI, Terry Albury, de haber filtrado información clasificada a un reportero. Es el segundo informante acusado bajo la Ley de Espionaje desde que el Presidente Donald Trump tomara posesión de su cargo.
El martes, 27 de marzo, el Departamento de Justicia denunció a Terry Albury de haber incumplido la Ley de Espionaje por haber supuestamente filtrado información clasificada a un reportero, según ha informado el Minneapolis Star-Tribune.
El uso de la Ley de Espionaje para criminalizar la difusión de información como si se tratara de espionaje es muy preocupante”, afirma Margaux Ewen, directora de la oficina de América del Norte de Reporteros sin Fronteras. “Las filtraciones son la esencia del periodismo de investigación y la persecución por parte del gobierno estadounidense a los informantes por espionaje tiene repercusiones directas para la libertad de prensa”, advierte.
La defensa de Albury informó el 28 de marzo que acepta toda la responsabilidad por sus acciones y añade que “como único agente afroamericano del FBI en el terreno en Minnesota, las acciones del señor Albury se deben a un compromiso consciente con la seguridad nacional a largo plazo y los sesgos sistemáticos del FBI”.
No es la primera vez que se juzga a un informante bajo la Ley de Espionaje en la presidencia Trump. En junio de 2017 el Departamento de Justicia acusó a Reality Winner por recabar, transmitir o perder información de defensa tras la publicación en The Intercept de una información sobre un documento de la NSA que mostraba la interferencia rusa en las elecciones presidenciales de 2016.
Los cargos contra Albury se producen en menos de un año desde que el fiscal general Jeff Sessions anunciara sus planes contra los informantes. En una conferencia de prensa en agosto, Sessions dijo que el Departamento de Justicia había más que triplicado sus denuncias contra filtraciones en comparación con las investigaciones abiertas por la anterior administración. En los meses posteriores Sessions no garantizó de forma repetida la seguridad de los periodistas y sus fuentes, afirmando que usaría la Constitución para priorizar la seguridad nacional sobre la protección de los periodistas.
Estados Unidos ocupa el puesto 43 de los 180 países que conforman la actual Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa elaborada anualmente por Reporteros sin Fronteras.