Con ocasión del Día Mundial contra la Cibercensura Reporteros sin Fronteras publica la edición 2014 de su informe “Enemigos de Internet”. Este documento, basado en investigaciones desarrolladas por el Despacho de Nuevos Medios de Comunicación y los investigadores de RSF, descubre, identifica, señala a las instituciones que, al interior de los Estados, llevan a cabo la represión en línea.
Para salvaguardar la seguridad territorial, las instituciones señaladas en este informe –entre ellas la Autoridad de Telecomunicaciones (Paquistán), la Agencia Central de Información Científica y Tecnológica (Corea del Norte), el Ministerio de Información y Comunicaciones (Vietnam) y la Oficina Estatal de Información de Internet (China)– han sobrepasado con creces su misión original, efectuando una censura y una vigilancia ilimitada de los actores de la información.
Tres de las 32 instituciones señaladas como “Enemigos de Internet” por Reporteros sin Fronteras operan en democracias que, no obstante, pretenden defender la libertad de expresión y la libre circulación de información. Así, las prácticas de la National Security Agency (NSA) en Estados Unidos, del Government Communications Headquarters (GCHQ) en el Reino Unido y del Centro para el Desarrollo de la Telemática en India no tienen nada que envidiar a los organismos homólogos chinos, rusos, iraníes o bahreiníes.
El control de la información en línea no sería posible sin la colaboración de empresas privadas. En la edición precedente del informe de Enemigos de Internet, Reporteros sin Fronteras señalaba a los mercenarios digitales: empresas que ponen su experiencia y sus conocimientos al servicio de regímenes autoritarios a cambio de sumas de dinero a menudo colosales. En 2014 la organización denuncia a los dealers de la vigilancia, a los sitios que ponen en contacto a empresas especializadas en la vigilancia y la censura con regímenes autoritarios. Entre los más conocidos y los más nefastos se encuentran: ISS World, Milipol y Technology against Crime.
Más allá de la denuncia, son las acciones las que permitirán poner fin a estas prácticas indignas. Reporteros sin Fronteras hace una serie de recomendaciones a los Estados y a las instituciones internacionales con el fin de acabar con los desvíos securitarios y paranoicos observados desde hace varios años.
Las prácticas de instituciones consideradas “Enemigos de Internet", que obran la mayoría de las veces en la sombra, deben ser denunciadas y conocidas por un mayor número de personas. Es así que los organismos internacionales, las Naciones Unidas, Europa o los acuerdos que regirán la exportación de tecnología de vigilancia podrán hacerse cargo de estos problemas y legislar, a fin de que estas prácticas cesen lo más rápido posible. Reporteros sin Fronteras invita a los internautas del mundo entero a que se unan a esta iniciativa.
¡Movilízate!
-
Inscríbete en "Thunderclap", lanzado el 12 de marzo por Reporteros sin Fronteras para hacer escuchar tu voz.
- Interpela en las redes sociales a los jefes de Estado encargados de estas instituciones.
- Cambia tu avatar en Twitter o tu foto de perfil en Facebook por el logo "contra la censura en línea" de Reporteros sin Fronteras.
Internet es un bien común. No dejemos que las instituciones
“Enemigas de Internet” hagan de la Red un arma al servicio de sus intereses particulares.