En pocos días, el ejército israelí ha ocupado la sede de la radiotelevisión jordana y ha detenido a dos periodistas marroquíes, en Ramallah. Por otra parte, y a pesar de la reciente liberación de un periodista palestino, el Estado israelí mantiene detenidos a cinco profesionales de los medios de comunicación palestinos.
En pocos días, el ejército israelí ha ocupado la sede de la radiotelevisión jordana y ha detenido a dos periodistas marroquíes, en Ramallah. "Después de atacar a los periodistas palestinos, ahora el ejército israelí impide que los periodistas árabes puedan trabajar libremente", declaró Robert Ménard, secretario general de Reporters sans frontières. "Cuando han pasado cuatro meses desde el inicio de la operación "Escudo", continúan los atentados a la libertad de prensa en los territorios palestinos, sin rebajar su intensidad", añadió. Reporters sans frontières recuerda que, en cuatro meses, ésta es la cuarta oficina de un medio de comunicación ocupada por el ejército israelí. Por otra parte, el Estado israelí mantiene detenidos a cinco periodistas palestinos.
El 8 de julio de 2002, por la mañana, fue ocupada por el ejército israelí la sede de la radiotelevisión jordana (JTV), situada en Ramallah. Según el testimonio de Abdallah al-Hout, corresponsal de la JTV, "algunos soldados entraron en las oficinas, de manera provocadora, y trataron de forma inhumana a los empleados que estaban presentes". "Nos amenazaron con sus armas y registraron las oficinas". Los militares se incautaron de films, así como de los pasaportes y los carnets de prensa de Abdallah al-Hout y Akilm al-Amr, dos de los periodistas presentes. Los documentos les fueron restituidos cinco horas después, tras la intervención del representante de Jordania en Gaza, ante las autoridades israelíes.
Este es el segundo incidente en que se ven implicados algunos periodistas jordanos que trabajan en los territorios palestinos. En efecto, el 3 de junio de 2002, Mashhour Abu Eid, corresponsal de la agencia oficial de prensa jordana Pétra, fue expulsado de Israel, cuatro días después de haber sido detenido en Naplusa, mientras cubría una manifestación de pacifistas occidentales.
A pesar de que el 27 de junio de 2002 salió en libertad Maher el-Dessouki, otros cinco periodistas palestinos continúan detenidos en Israel. Khalad Alí Zwawi y Kamel Alí Jbeil, del diario Al Quds, Hussam Abu Alan, fotógrafo de la Agencia France-Press (AFP), Yousri El Jamal, técnico de sonido de Reuters, y Ayman El Kawasmi, director de la radio local El Horriya, fueron detenidos entre el 15 y el 30 de abril de 2002, y puestos en situación de detención administrativa, durante tres meses. La detención administrativa de Kamel Alí Jbeil, que debía finalizar el 1 de julio pasado, acaba de ser prolongada, durante otros tres meses, por las autoridades israelíes. Por lo que se refiere a Yousri El Jamal, el 28 de junio un tribunal militar declaró que debía quedar en libertad el 10 de julio.
Por otra parte, el 4 de julio de 2002, por la mañana, fueron detenidos por dos soldados israelíes, en el momento en que salían del cuartel general de Yasser Arafat, en Ramallah, Anas Bensalah y Hassan Bouchenni, respectivamente periodista y camarógrafo del segundo canal de la televisión pública marroquí 2M. Los dos militares les pidieron sus carnets de identidad y sus pasaportes. Posteriormente, los dos periodistas fueron conducidos al Ministerio de la Cultura y de las Artes, transformado en centro de detención. Algunos soldados les pidieron información sobre la situación en el interior del cuartel general, sobre el contenido de la entrevista y sobre la salud física, psicológica y mental de Yasser Arafat. Anas Bensalah y Hassan Bouchenni salieron en libertad, cinco horas más tarde, sin recibir ninguna explicación. El sindicato nacional de la prensa marroquí había pedido, en una carta a las autoridades israelíes, su liberación inmediata.