EE.UU. RSF ve alarmante la retirada del pase de prensa a la Casa Blanca al corresponsal de CNN, Jim Acosta
Reporteros sin Fronteras (RSF) expresa su conmoción ante la desenfrenada hostilidad que exhibió el presidente estadounidense, Donald Trump, hacia varios corresponsales en la Casa Blanca durante una conferencia de prensa el 7 de noviembre. El acto desembocó en la retirada de la credencial de prensa del corresponsal de la CNN, Jim Acosta. Este castigo es antidemocrático y envía un escalofriante mensaje a quienes observan cómo el presidente de los Estados Unidos debe comportarse con los periodistas que le hacen preguntas difíciles.
"La revocación del pase de prensa para la Casa Blanca a Acosta, y especialmente porque las razones son un montaje, es un mazazo para la libertad de prensa", señala Margaux Ewen, directora de la oficina de Reporteros sin Fronteras en Norteamérica. “Esta severa medida, combinada con el trato del presidente a otros apreciados reporteros en la Casa Blanca, es inaceptable teniendo en cuenta el clima, ya hostil, para los reporteros en los Estados Unidos. El presidente Trump ha seguido refiriéndose a los periodistas como "enemigos del pueblo" y no los trata con respeto, ni a ellos ni a su profesión. Ahora, al negarle el acceso, parece que toma represalias contra un reportero por hacerle preguntas difíciles a su administración. La Casa Blanca debe cesar su continuo asalto a la Primera Enmienda”.
Horas después de una conferencia de prensa del presidente Trump que derivó rápidamente en hostilidad, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Sarah Huckabee-Sanders, explicó en Twitter que el pase de prensa de Acosta había sido suspendido por "ponerle la mano encima" a una asistente de la Casa Blanca que trabajaba en la conferencia de prensa. Pero la cobertura en directo de C-SPAN del evento contradice esto de lleno. En cualquier caso, Sanders compartió un vídeo que muestra que la información fue manipulada para que pareciera que Acosta se comportaba de manera agresiva con la mujer. En respuesta, CNN llamó a la decisión "represalia" basada en "un incidente que nunca sucedió".
El presidente Trump interrumpió repetidamente a Acosta durante la conferencia de prensa mientras éste intentaba hacer preguntas sobre la "caravana de los migrantes" y la investigación de Rusia. Una asistente de la Casa Blanca intentó arrebatarle el micrófono de la mano a Acosta. "Ya vale. Baja el micrófono. La CNN debería avergonzarse de tenerte trabajando para ellos. Eres una persona grosera y terrible. No deberías estar trabajando para CNN", dijo el presidente Trump. Más tarde se dirigió a Acosta diciéndole: "Cuando informas noticias falsas, cosa que CNN hace mucho, eres el enemigo del pueblo".
Durante la conferencia de prensa, otros reporteros también fueron blanco de la hostilidad del presidente Trump. Cuando el reportero de NBC News, Peter Alexander, defendió el trabajo de Acosta como periodista, el presidente Trump le respondió: "Tampoco soy muy fan de los tuyos". Este reproche venía precedido por lo que le hizo el presidente Trump a April Ryan, corresponsal en la Casa Blanca para American Urban Radio Networks, a la que mandó "sentarse" cuando intentó hacerle una pregunta después de que él diera el turno a otro reportero. No mucho después, el presidente acusó a la reportera de PBS Newshour, Yamiche Alcindor, de formular una "pregunta racista" cuando ella señaló que algunos interpretan su profesado "nacionalismo" como un abrazo del nacionalismo blanco.
Hace apenas unas semanas, la CNN fue atacada con tres paquetes sospechosos que se asemejaban a las 14 bombas de fabricación casera que se cree que un particular ha enviado a otros destacados críticos del presidente Trump. La policía interceptó el paquete más reciente, dirigido a la sede de CNN en Atlanta, y el presidente de CNN Worldwide, Jeff Zucker, emitió una nota el 29 de octubre para asegurar a la ciudadanía que "no hay peligro inminente para el Centro CNN".
Tras caer dos posiciones en el último año, Estados Unidos ocupa el puesto 45, entre 180 países, en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2018 de Reporteros sin Fronteras.