Asesinato de un defensor de los Derechos Humanos y opositor al golpe de Estado
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“El asesinato, el 13 de diciembre de 2009, en Tegucigalpa, del defensor de los Derechos Humanos Walter Tróchez, nos recuerda de manera cruel que Honduras no ha acabado aún con la represión que siguió el golpe de Estado del pasado 28 de junio. La comunidad internacional se equivocaría al creer que las elecciones del 29 de noviembre, deseadas por las autoridades de facto, pusieron fin a la profunda crisis política que afecta el país. Walter Tróchez ha pagado con su vida su compromiso a favor de los derechos humanos, la verdad sobre las exacciones nacidas del golpe de Estado y la defensa de las minorías sexuales. Que se le haga justicia constituirá una primera prueba crucial para el futuro gobierno - elegido en condiciones contestables -, que pretente promover una reconciliación nacional. La reconciliación sin justicia no tiene sentido”, declaró Reporteros sin Fronteras.
Militante de la causa gay y lesbiana, defensor de los enfermos de sida, Walter Tróchez, de 25 años, formaba parte de los opositores al golpe de Estado que derrocó al presidente Manuel Zelaya el 28 de junio de 2009. Desde esa fecha y entre otras cosas, llevaba una labor de información e investigación para el Centro de Investigación y Promoción de Derechos Humanos (CIPRODEH). Por la noche del 13 de diciembre, mientras caminaba por una calle de Tegucigalpa, Walter Tróchez fue asesinado de un disparo en el pecho por un desconocido que huyó enseguida.
Detenido una primera vez, golpeado y humillado a causa de su homosexualidad tras una manifestación delante del Congreso, el 20 de julio, Walter Tróchez fue secuestrado y amenazado de muerte en su calidad de opositor al golpe de Estado, el 4 de diciembre, por unos individuos encapuchados de los que consiguió escapar. Se dio a conocer su caso a las autoridades a partir del día siguiente sin que éstas juzgasen útil otorgarle protección.
Las gravísimas violaciones del derecho a la información cometidas en el contexto del golpe de Estado, constatadas entre otras ocasiones durante una misión internacional efectuada en el país desde el 1 al 7 de noviembre, no terminaron con las elecciones del 29 de noviembre. El mismo día de la votación, la policía intentó asaltar la sede de la emisora regional Radio Uno en San Pedro Sula, los equipos de la cadena Canal 36 y de Radio Globo fueron requisados de nuevo, y un fotógrafo español independiente, Mario Gazcón Aranda, fue detenido un corto tiempo. El 5 de diciembre, unos desconocidos armados agredieron y desvalijaron la redacción del periódico de oposición en línea El Libertador, cuyo director, Jhony Lagos, sufrió con regularidad amenazas desde el 28 de junio.
A causa del golpe de Estado y de sus consecuencias, Honduras ha caído al puesto 128 de 175 países en la clasificación mundial establecida por Reporteros sin Fronteras para el año 2009.
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20.01.2016